domingo, 25 de diciembre de 2011

Christmas


En estos días que corren, te deseo lo mejor, que los pases en familia, con amigos, o en solitario en busca de la felicidad. Que disfrutes de cada minuto, de las luces, de los papeles de regalo coloridos, de las velas titilando, de los dulces villancicos, de los silencios, de las carcajadas, de las multitudes y de las calles desiertas. Que cojas aire y te relajes, que aproveches los instantes que la magia te regala, que aún en los peores momentos, no pierdas la ilusión, que por mucho que la magia se intente evaporar, la recojas en botecitos como un gran tesoro y la dejes en la estantería para que nunca abandone tu casa, que conserves la ilusión, que no te falte amor, ni amistad. Que te asegures de tener bien cerradas las ventanas para que el calor de la familia no se escape, y dure por mucho tiempo junto a ti, que observes las luces del árbol y grabes en tus retinas la alegría que refulgen, que nunca, nunca dejes de perseguir tus  sueños, y que ese señor llamado Papá Noel te traiga mucha alegría y felicidad.
¡Feliz Navidad!

jueves, 22 de diciembre de 2011

Ending life

No parecía enorgullecerse de nada, nada le complacía, nadie saciaba su ansia de poder, de dominarlo todo, de dominar a todos. Era tal su sed de tenerlo todo bajo control que algunas veces no conseguía ni controlarse a sí mismo y ordenaba tareas incoherentes. Todo lo observaba y de todo realizaba minuciosos exámenes. Todo debía estar perfecto, siempre.
Siempre andaba con el ceño fruncido y en extrañas ocasiones se les escapaba una sonrisa, y menos aún una carcajada. Sus finos labios apretados dejaban ver de tanto en tanto una malvada sonrisa que auguraba  que quizá algo malo tramaba su retorcida mente.
En el fondo no era mala persona, pero había conseguido ganarse la fama de "gruñón exigente" que dominaba su personalidad. Se quejaba por la falta de atención o disposición a aquello que requería, o gustaba en cada momento, pero sus pequeños ojos de aceituna no le permitían ver como muchos se desvivían por él y, claro está, nunca salía de sus labios la palabra mágica que tanto cuesta escuchar en estos tiempos: "gracias".
Tras largos años de soledad su corazón estaba ya pensando en pararse, en dejar que la maldad se le escapara por los poros, que fluyera y se disolviera en el aire y los océanos. El severo anciano exhaló sus últimos suspiros entre recuerdos de una vida que no le había gustado vivir...

martes, 6 de diciembre de 2011

Realize

No sé si os habréis dado cuenta de que nada es permanente, que todo lo bueno acaba, que lo malo pasa, que la gente cambia y cada persona es única, que los años corren (¡y vamos si corren!), las estaciones pasan y los años pesan, que "siempre" es demasiado tiempo, y que nunca debes decir "nunca", que los sueños se cumplen, que las promesas se rompen, se olvidan, o se pierden, que las miradas pueden matar, que unos vienen y otros van, que las flores se marchitan, que nos queda mucho por aprender, que la vida es corta y que nada ocurre por casualidad, que el sol sigue brillando cada mañana y la luna regresa al cielo cada noche, que los pulmones siguen cogiendo aire y que el corazón continúa bombeando sangre. Que el mundo sigue girando y que lo hará por mucho tiempo...

sábado, 3 de diciembre de 2011

December

El frío se cuela por los poros de la piel, las narices se esconden tras las bufandas o lucen rojizas bajo las luces de Navidad, en cualquier sitio que mires, hay botas, gruesos abrigos, gorros de lana de todas las formas y colores, y el frío adentrándose entre los tejidos. Bocas humeantes que expelen vaho, las manos en los bolsillos, o recubiertas por guantes o manoplas. Los árboles desnudos bajo la atenta mirada de la luna, algunas hojas volando sobre frías ráfagas de viento que vaticinan heladas al amanecer y otras rodando por el suelo, cansadas después de un largo año agarradas a las ramas de los árboles en las alturas. Las grises nubes recubriendo el cielo. Olor a castañas asadas, a churros recién hechos y a chocolate caliente. Las aceras húmedas reflejan la luz de los semáforos y las farolas alumbran con su luz amarillenta titilando, como si el frío las hiciera tiritar. Las calles engalanadas con rojas flores de pascua y luces colgando de las ventanas y enroscadas en las copas y los troncos de los árboles. Gente comprando ilusiones y niños ilusionados señalando escaparates llenos de color que harían volar la imaginación de cualquiera. Se oyen cascabeles con ritmo irregular, y alegres villancicos que anuncian las fiestas venideras. Gente cargando bolsas llenas de paquetes envueltos en coloridos papeles de regalo, con enormes lazos hechos con sumo cuidado, o correteando apresurada para ultimar los últimos detalles de la cena de Nochebuena, o la comida de Navidad.  El invierno ya está cerca, y vuelve a ser lo de todos los años.