martes, 16 de abril de 2013

Books


Los libros llenaban gran parte de su vida. Nada la hacía flotar más que un montón de páginas llenas de letras, porque para ella no eran solo letras, eran mucho más. Las palabras que se acumulaban en las hojas amarillentas eran aventuras, eran historias de amor y eran finales felices o tristes relatos. 
Su imaginación se disparaba cada vez que se sentaba en su sillón junto a su llena estantería, que cada día crecía más, quizás con una taza de café, quizás con un té, y dejaba pasar horas y horas antes de levantarse, si es que llegaba a hacerlo. 
Prefería la soledad y el papel antes que a la gente, no le importaba pasar su vida sin compañía porque sabía que sus más fieles amigos eran los personajes de sus historias, ellos que no cambiaban, ellos que siempre que los necesitara estarían en el mismo sitio, dispuestos a contarle el mismo cuento de nuevo y a dejarla viajar por sus universos...
Leía sobre gente que no podía ser, sobre aventuras que nunca tendría. Su vida era lo suficientemente buena hasta que un día, dejó de serlo. Chuck quería más.

"She read about people she could never be, on adventures she would never have. Life was good enough until one day it wasn't. Chuck wanted more."

sábado, 6 de abril de 2013

Red umbrella

El aire se colaba  por debajo de las puertas, sonando cuando las rendijas eran demasiado pequeñas. La oscuridad entraba por las ventanas, pues las nubes no dejaban ver el sol, y la lluvia azotaba los cristales con violencia, como queriendo desgarrarlos con cada gota. Más allá de las paredes de las casas, la ciudad estaba empapada, y sus habitantes se resguardaban como podían debajo de sus paraguas. Muchos corrían para resguardarse, otros tantos evadían las gotas de agua sentándose en un bar a tomar un café caliente, pero todos intentaban pisar las aceras el menor tiempo posible.
La avenida se quedó vacía, solo una joven pareja permaneció en ella, ajenos a la tromba que caía sobre su pequeño paraguas rojo. Parecía una despedida, pues en sus caras se veía que ya se estaban echando de menos, y sus labios se negaban a separarse, conscientes de que el tiempo que pasarían separados les parecería una eternidad.

miércoles, 3 de abril de 2013

Imagine

Por las noches lo imaginaba a su lado, irradiando calor, dándole la confianza que necesitaba para seguir adelante. Dormido, sin abrir los ojos, tumbado junto a  ella solo para poder admirarlo, para que su aroma acaramelado la indujera a un profundo sueño. Imaginaba como sus susurros le hacían cosquillas en el cuello, y  llevando a cabo diálogos mentales en la oscuridad, que se convertían en monólogos.
Sin embargo, a pesar de que junto a ella solo había un hueco, un  pedazo de colchón vacío, sin sentimientos, que pretendía llenar de ilusiones pero que nunca estaba completo, no perdía la esperanza de que algún día él apareciera, que abriera los ojos y sus labios se fusionaran con los suyos.